Disfruta de su mar, de sus calas, de sus chiringuitos, de sus deportes acuáticos. Descubre su interior, con sus rutas, sus senderos aislados y su fauna y flora salvaje visible en Bèrnia, en Oltà y en la Solana.
Muchas veces dudamos sobre qué destino elegir en vacaciones. Dudamos si irnos al mar o a la montaña, si buscar un lugar donde reine el silencio y la calma o quizás buscar el bullicio y el ajetreo de propuestas festivas, culturales y gastronómicas. Propuestas más urbanitas o más campestres. Otras veces, en cambio, lo tenemos clarísimo. Queremos un poco de todo.
Si ese es tu caso, bienvenido a Benissa. Porque aquí te esperamos todo el año, más allá del fervor veraniego. Porque nuestras propuestas no caducan y cada mes se renuevan. Porque el mar se vive todo el año, y el interior, también. ¿Conoces la ruta del moscatel? Se adentra por caminos agrícolas que atraviesan nuestros preciados viñedos de uva moscatel. ¿Sabes lo que son los riuraus? Son una de nuestras señas de identidad. Son esas construcciones rectangulares y de arcos porticados muy típicos de nuestra comarca. En su origen servían para secar la uva pasa. Hoy cualquier villa con solera que se precie presume de ellos y paseando por nuestras partidas rurales podrás ver muchos.
También puedes ir a contemplar un amanecer en las calitas de nuestra costa y sentir la conexión con la naturaleza. O buscar una puesta de sol en Bèrnia o en Oltà, para llevarte una hermosa postal de este terruño rocoso en el que la vista siempre acaba perdiéndose en el Mediterráneo.
¿Has probado el puchero de pulpo? ¿Y el arroz del senyoret? Puedes hacer una cata gastronómica y después hacer la digestión en una hamaca mecido por la suave brisa mediterránea. Y, si por el día hace demasiado calor, aprovecha los últimos instantes de la tarde para recorrer las estrechas callejuelas empedradas del centro histórico y conocer algo más de nuestra historia milenaria. Su conservación es excelente. Muchas de sus casas nobles y señoriales son hoy museos o edificios que acogen instalaciones municipales, de forma que se pueden visitar y así llevarte un recuerdo de lo más auténtico acerca de la historia del municipio.
Porque una cosa está clara, si decides pasar aquí tus vacaciones, no tendrás tiempo para aburrirte. Ahora bien, olvídate de las prisas y las tensiones. Respira el aire puro, tanto de mar como de montaña, y vive tu propia experiencia. Déjate llevar.